-Central Hidroeléctrica de Bustavil
-Sierra Hidráulica de Bustavil
- CENTRAL HIDROELÉCTRICA DE BUSTAVIL
Ubicada en la margen derecha del Río
Bárcena (Río Grande, le llaman en la zona),
en la confluencia con el Río de La Castañar, la Central de Bustavil entró en
funcionamiento en 1930, cuando la mayoría de los lugares del entorno aún no
tenían suministro de electricidad.
En esa época existía ya alguna “dinamo” en la comarca, instalada por los propios vecinos en molinos de su propiedad, pero el caso de la Central de Bustavil fue diferente.
Para empezar,
la iniciativa fue de un ingeniero “foráneo” que vio la zona apropiada para
levantar una central de mayores proporciones. Con este propósito se reunieron
varios socios para sacar adelante el proyecto, contando con la participación de
algunos vecinos de Bustellón que eran propietarios de fincas afectadas por la
obra.
Aunque en la actualidad parece estar
situada en un paraje aislado, difícilmente accesible y poco transitado, en el
momento de su construcción estaba rodeada de prados y espacios abiertos y era
un lugar de paso al que llegaban caminos de San Frechoso, Bustoburniego y
Bustellón. Este último daba servicio a los prados que se abrían por encima de la
central y era utilizado a diario por los operarios, pero el resto de caminos
también hicieron falta durante la construcción de la central. Así, los
materiales de obra se transportaron desde San Frechoso, incluyendo piedras
extraídas y reutilizadas del llamado Castillo de los Moros, donde debió existir
un castro. En cambio, los tubos de fundición que conforman el cubo por el que
se lanzaba el agua desde la cámara de carga, se metieron desde arriba con ayuda
de los vecinos de Bustoburniego.
Aguas arriba del Río de la Castañar,
se construyó una gran "Banzao" para la captación de agua, que era derivada
hacia la central a través de un largo canal encajado en la ladera y defendido
por un muro de mampostería.
Para alimentar la central, se construyó un amplio depósito encajado en la ladera, varios metros por encima del edificio. Este depósito conocido como El Cameral, está delimitado por un muro de mampostería, que se prolonga en un largo canal por el que se captaba agua del Río de la Castañar. Desde El Cameral, al agua se lanzaba con fuerza por un tubo largo y casi vertical haciendo girar la turbina de la central. Para evitar obstrucciones por restos vegetales (ramas, hojas), la boca de ese tubo estaba protegida por una rejilla, que era preciso limpiar con asiduidad. Esta salida podía ser bloqueada en momentos de inactividad. Entonces, el sobrante de agua se expulsaba por un aliviadero abierto en el muro perimetral, desde el cual caía en cascada de vuelta al curso del Río de la Castañar. Por último, una tercera boca permitía desviar agua por otro canal hacia la Sierra Hidráulica de Bustavil, que había sido construida unos años antes en un enclave próximo.
“La Bustavila” vendía electricidad por
bombillas, lo que demostró ser un error al cabo de no mucho tiempo, pues
enseguida la gente aprendió a instalar más puntos de luz de los que tenía
contratados, lo que hacía bajar la tensión y que el servicio fuera deficiente.
Con todo, se mantuvo en funcionamiento hasta los años 50, alcanzando cierta
importancia en la zona y enviando corriente a lugares tan alejados como la
Villa de Tineo o Soto de la Barca.
Aunque pueda resultar curioso, “La Bustavila”
no daba luz a todos los vecinos de Bustellón. De hecho, en 1935 se creó en el
pueblo una cooperativa para levantar un molino y minicentral independiente.
Este molino funcionaba durante el día, mientras que la central lo hacía solo
por la noche. Aunque cada instalación tenía su propio tubo por el que se
lanzaba agua para accionar el mecanismo hidráulico, ambas compartían una misma
presa. Por ello, todas las tardes había que bajar a “echar el agua” a la
central, operación que se repetía de día para cambiar el uso al molino. La
central tenía 12 socios, mientras que el molino solo contaba con 4, lo que era
todo un lujo. Esto fue así durante 35 años durante los que la “minicentral” dio
corriente al pueblo. Posiblemente quedó abandonada, aunque aguantó en pie hasta
La Santiagada del 25 de Julio de 1997, cuando una tremenda riada acabó por
arrasar el edificio.
2) El Cameral y Presa que viene desde el Banzao
3) Tubo hacia la turbina 4)Turbina 5) Aliviadero
Texto e Ilustración: Luis Frechilla
3) Tubo hacia la turbina 4)Turbina 5) Aliviadero
Texto e Ilustración: Luis Frechilla
- SIERRA HIDRÁULICA DE BUSTAVIL
La Sierra Hidráulica de Bustavil, fue
una importante serrería de madera, casi revolucionaria en el momento de su
construcción, hacia el año 1923, levantada en el paraje de Bustavil, a orillas
del Río Bárcena. Es una obra de mampostería con techo a dos aguas cubierto de
teja, con una altura principal, donde se hacía el trabajo, y un “sótano”, donde
se localizaba el rodezno que hacía girar todo el mecanismo impulsado por la
fuerza del agua.
El aserradero estaba alimentado por
un largo canal derivado del curso del Río de la Castañar y compartido con la
central de Bustavil, que se levantaría pocos años más tarde en un enclave
cercano. Al aprovecharse de esta misma infraestructura, el aserradero se
beneficiaba del amplio de depósito, o cámara de carga, que se construyó por
encima de la central para garantizar un suministro de agua estable y continuo
en cualquier época del año. El caudal derivado desde este depósito se regulaba
mediante una compuerta e iba a parar, unos metros por encima de “la sierra”, en
un “cubo” de cemento revestido de mampostería, por el que se lanzaba directamente
contra las palas o “cucharas” de un
rodezno vertical instalado en el sótano del aserradero. Este rodezno transmitía
su movimiento a un juego de poleas de madera, que eran las que, finalmente,
hacían que funcionara la sierra, cuya hoja tenía orientación vertical.
Para fabricar distintas piezas de madera bastaba con arrastrar un tronco de dimensiones apropiadas contra la sierra, gracias a un carro dispuesto sobre unos railes de acero, que atravesaban la estancia principal. La posición de la sierra respecto al carro podía ser regulada para conseguir el grosor requerido para el corte, y una puerta en la pared contraria a la entrada facilitaba el movimiento de las piezas más largas.
1) Rodezno vertical con palas 2) Poleas de transmisión
3) Sierra vertical de cinta 4) Carro sobre raíles
Para abastecer de madera al
aserradero se traían carros cargados de troncos desde Bustellón, pero en lugar
de llegar con ellos hasta la puerta de la sierra, se tiraban por la ladera
desde el camino, haciéndolos rodar por un prado hasta las instalaciones de la
fábrica. Luego se metían a mano en la sierra. Las piezas ya trabajadas se
apilaban ordenadamente por debajo del edificio a la espera de ser entregadas al
cliente. Llegado ese momento, la madera se sacaba en carros tirados por bueyes
por el camino que cruza el Río Bárcena y sube hacia San Frechoso,
continuando por el Cortinón en dirección a San Martín.
El Aserradero de Bustavil era propiedad de 2 socios de Bustellón que tenían el negocio orientado principalmente a la fabricación de tablón de 5 cm. para carpintería. Teniendo en cuenta la época en la que se centró la actividad de la fábrica, en la parte central del siglo XX, no deja de sorprender que estas piezas se enviaran a clientes de lugares tan distantes como podía ser la ciudad de Barcelona. Finalmente, la Sierra de Bustavil fue clausurada hacia los años 70, unos50 años después de su construcción.
PR.AS.-288: SENDA DE BUSTAVIL (TINEO)
En el Blog A Lo Bouzo, con un fenomenal trabajo de una persona con familia en San Frechoso, se explica la ruta muy detalladamente, con un gran texto y fotografías, en el siguiente enlace: http://alobouzo.blogspot.com/2014/06/inspeccion-de-la-pras-288-senda-de.html